"¿Wendy pájaro?"
8.7.11
Ni soy poeta, ni ensayista; mucho menos geek, gamer, hipster, o ‒como diría mi hermano‒ “humanista chocante”. Tampoco vendré a escribir “valurdeses” al mejor estilo de los comerciales de Barbie o Disney Channel, ya saben, esos que predican que las muñecas con apariencia de top model y los artistas multitalentosos y más dinero de lo que recibes cada mes “Son como tú”. No, señores: nadie es igual a nadie.
No pretendo que nadie se identifique conmigo, porque estoy consciente de que no soy la gran cosa. Primer post en un blog que redacto en mi vida, y como ven, la falta de creatividad me ha obligado a hablar sobre lo que voy a hablar. Guao, qué interesante…
Y lo mejor es que ‒a diferencia de otros blogs‒ aquí puedo hablar de cualquier cosa (¡yipi!). Así que lo primero que me ha cruzado por la mente es el típico tema de la eterna juventud… ¿A qué me refiero con esto? Tanto que muchos teníamos que aguantar los “chalequeos” de los compañeros en el colegio si llegábamos a decir que nos gustaba ver caricaturas, o jugar con figuras de acción a los 12 años. ¡SANTO DIOS! O éramos retrasados con respecto a los demás, o es que ellos no querían aceptar que todavía eran niños. Obviamente, opto por la segunda opción.
No me da pena admitir que con 18 años me sigue gustando ver caricaturas y animes, de hecho, no creo que exista un límite de edad para disfrutar de estos géneros televisivos. No veo por qué existe tanta prisa en crecer entre los púberes de las últimas generaciones. La infancia, como la conocemos, se está perdiendo cada día más y no hace falta ver un post gracioso en Tumblr para darse cuenta de ello. El hecho de que una niña de 9 años no desprecie la idea de jugar con muñecas, hace que esa niña sea una en un millón. ´
No es que sea infantil. En mi opinión muy wendyriana, es necesario mantener con nosotros nuestro niño interior… Digan lo que quieran, pero la avaricia y la envidia que hacen que este mundo sea tan horrible muchas veces, son elementos ignorados por los infantes. Crecer es necesario, pero eso no significa volverse un viejo amargado y estirado.
Listo, a esta cosa pareciera hacerle falta insertarle un arcoíris, pero ya he dicho lo que quería decir. ¿El motivo? Hoy (gracias al cumpleaños de mi hermanita) me he percatado de que los años pasan como las motos en la Avenida Libertador; la gente crece, la inocencia se pierde… Thanks to Chuck Norris que mi hermanita no anda por ahí “perreando” ni haciendo nada parecido… Esto ha girado hacia lo sentimental señores. Simple opinión de esta servidora. Con mucho que agregar, pero sin poder hacerlo ya que sería tediosa leerlo, y sabiendo que ahora conocen mi complejo de Wendy, me he de retirar. Ob-La-Di, Ob-La-Da, hasta la próxima vez será*.
*Mal intento de lema de despedida pegadizo que el lector tiene todo el derecho de ignorar. Gracias, La Petite.
2 comentarios
Que finoooo!!! :D Me encantó, y si cabe decirse, yo también tengo complejo de Wendy, y a mucha honra!!! xD
ResponderEliminarNio-san ^^
ESA ES MI MEJOR AMIGA NOJODA, que digo amiga, mi hermana... La merma este post. Lo cual me recuerda que debería (haber hecho) hacer el mio. Pero no, aqui estoy leyendo los post de los demás y comentando el tuyo en ves de hacer el mio. Nice.
ResponderEliminarNos vemos en el espejo.